Quienes somos

Somos una joyería familiar sevillana con una historia rica en emprendimiento y dedicación.

Nuestro negocio comenzó de la mano de una madre, Carmen Pérez y su hijo, Pepín Román.

Por los años 50, Carmen era una persona valiente y emprendedora casada con José Román Castellón dedicado a la decoración del mueble, que tuvo que aceptar la inquietud de su mujer por querer empezar a trabajar en la comercialización de ropa de hogar, con las mejores empresas catalanas de aquella época. 

De sus tres hijos, el único varón José Antonio se sacrificó en acompañar a su madre por España y principalmente por Andalucía, portando enormes maletas, en los primeros coches que salieron por aquellos tiempos. Su simpatía y él saber tratar con la gente, la lanzó como destacada vendedora.

En uno de sus viajes a su hijo Pepín, le ofrecieron a llevar en una pequeña caja de metal de cigarros, que aún se conserva, con unos artículos de Joyería para que se los mostrará a la gran clientela de su madre. Al ver que se vendía muy bien, le planteó a su madre abandonar la comercialización de la ropa de hogar, que era mucho más pesada y engorrosa de transportar para centrarse en la Joyería.

Caja de puros donde Pepín llevaba sus joyas
La caja de metal de Pepín dónde nació Román Joyero

 

Pepín se convirtió en un experto en el negocio de la joyería después de viajar por todo el mundo y aprender el oficio de los mejores. Viajando a Italia, Ámsterdam, Suiza, Nueva York, Hong Kong,...

Consiguió su mayor deseo, ponerle una tienda a su madre para quitarle la paliza de tanto viaje, iniciando su primera tienda en Plaza Nueva, de la cual se mudaron a la calle Méndez Núñez, para acomodar la creciente demanda de regalos de bodas y empresas.

Pepín se casó con Carmen Hernández Hermoso con la que tuvo cuatro hijos, que son los que actualmente regentan el negocio. Su mujer, siguiendo los pasos de su marido impulsó notablemente el negocio de la misma forma ambulante que vio en él, atendiendo a la clientela en los domicilios de las mismas y ofreciendo lo más actualizado que se podía ver en joyería.

Sus hijos, bajo el mismo principio le dieron un giro, extendiéndose nuevamente por mas lugares y empezaron a atender a los clientes citándolos en los mejores Hoteles en las distintas ciudades, por toda España.

Familia Roman

Hoy en día, Román Joyero cuenta con dos establecimientos donde continúan ofreciendo a sus clientes joyas de alta calidad y diseños únicos, todo mientras mantienen los valores de calidad, diseño y atención personalizada que los han caracterizado desde su fundación.

En Román Joyero, nuestra historia y dedicación se reflejan en cada pieza de joyería que vendemos. Si estás buscando una joyería con una rica historia y un enfoque en la atención al cliente, no dudes en visitarnos en Sevilla.

¡Te esperamos con los brazos abiertos!

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